Frescura

Frescura
Pero el ruido del mar no se comprende, / se desploma continuamente, insiste / una y otra vez, con un cansancio / con una voz borrosa y desganada.... [Circe Maia, 1932]

lunes




No tengo mucho tiempo, ni ganas de escribir. Quizás si, pero hay algo que no quiero decir. En este intante siento un gusto amargo en la lengua y un leve pero persistente dolor de cabeza. Tendría que-... tantas cosas tendría que hacer que no tengo ganas. No creo que sea cuentión de ganas tampoco. Es algo así como cuando te cansás de jugar a las escondidas porqué intuís que el que cuenta ya sabe todos los escondites habidos y por haber, o que nunca existieron escondites. Y lo más importante: el que cuenta vendría a ser el  Señor Destino -o como quieran apodarlo.


No estoy tratando de ser sarcástica, ni poética, ni realista. Simplemente estoy tratando de no ser. Hay algo que hace tiempo caduca cada un tiempo promedio de 3 o 4 meses. No descubrí todavía qué es, pero caduca. Muy parecido al anti-virus de la compuadora. Ahora que lo pienso, en todo sentido. Estoy hasta de intalaciones eternas, procesos que me desgastan energía, para estar "cubierta". Siempre aparece un virus nuevo, siempre. Hay gente que se dedica a crearlos, no son virtuales!!! Seguro que por eso perdí las ganas y alguna otra cosa más que no me quiero dar cuenta. No estoy deprimida, ni malhumorada. Estoy con ganas de romper algo y no pagarlo,  de contestar mal y no ligar una cachetada -o poder responderla más fuerte-, de escribir para el orto y que nadie me corrija. Dicen que cuando uno carece de algo, este vacío se sublima con alguna capacidad nueva. Yo, sinceramente, a menos que me esté volviendo experta en algún tipo de meditación Zen apocalíptica, no siento que este estado me esté dando nada nuevo y, mucho menos, bueno. O si y no me doy cuenta. Darme cuenta de las cosas está bueno hasta ahí. No creo en las personas que dicen que prefieren la verdad de frente. ¿Le gusta vivir recibiendo bofetadas de todo el mundo? No lo creo. Lo intenté pero es demasiado duro. Además, no me banco los correctitos, si despectivamente lo digo. Hoy estoy re mala. Los que soportan todo me da la impresión que les hacés un pique con un cincel y se desarman. Y de última de que te sirven las críticas "constructivas", para ser mejor que quién... Me gustaría agarrar esa crítica-ladrillo y tirarsela por la  cabeza.

Productos importados. Me parece que estaba buscando en la góndola equivocada. Simplemente eso. El chango está demasiado lleno o vacio, a quién le importa. La cola es considerablemente larga y la carne en las heladeras está podrida. Cómo carajo llegue a este supermercado? Si voy al chino de la otra cuadra puedo conseguir todo por la mitad y aparentemente en condiciones. Na, tampoco. Me cago en el hambre. El voraz.




Chau. Siempre me gustó decir: hasta nunca.

No hay comentarios:

Publicar un comentario