Frescura

Frescura
Pero el ruido del mar no se comprende, / se desploma continuamente, insiste / una y otra vez, con un cansancio / con una voz borrosa y desganada.... [Circe Maia, 1932]

miércoles

dos algo en un día de lluvia non finished / advanced

Solo un cartón hecho caja
lleno de vino, tu mano
seca sobre uvas ficticias
       gatea por mi espalda
curva de ganas,
la vereda, la noche.
Mientras,
una sábana blanca sostiene cuerpos
muertos de ayer
Qué hambre de amor tenés,
tanta hambre      que  
llegaste a acariciar basura.
Ahora, tus yemas están de luto.


Che, boli.
Todavía te veo: la luces de colores, calándote la piel, el tajo en el cachete izquierdo, siento que arde pero todo es un reflejo temblando. Las gotas brillaban en las botellas. Son más jóvenes que nosotros. Blancas, diminutas, histéticas. Volvé, por favor y cebá más matea las cuatro de la mañana, cuando nadie te ve, con las uñas llenándose de restos. Qué zarpada esa lluvia, los vaguitos afuera pidían tragos, los apuraban, en el medio, nos miramos. La propina en la frappera. Alevoso mal, decís. Y detrás de la barra, se empezaba a dejar ver, entre copas, este tiempo.



1 comentario: